HECHO EN SRI LANKA, EL LADO MÁS HUMANO DE LA CADENA DE PRODUCCIÓN

By Fashion Revolution

6 years ago

“La moda rápida es como Tinder. Cantidad por encima de calidad”, así abre fuego Ayesa Barenblat, la fundadora de Remake, una organización que pretende humanizar la cadena de producción detrás del negocio de la moda a través de  proyectos y películas que ponen el foco sobre las personas más afectadas por esta industria tremendamente rentable y a la vez destructiva.

Su último proyecto, Made in Sri Lanka, sigue los pasos de 3 estudiantes de diseño de moda de la escuela Parsons que tras visitar una de las capitales mundiales de la industria textil cambiaron completamente su percepción sobre sector al que se quieren dedicar.

“Cuando pasó [el desastre de] Rana Plaza me di cuenta de que lo que necesitamos es un cambio radical y mi contribución es poner en marcha una especie de cuerpo de paz para la industria de la moda”, explicó Barenblat.

“Las personas más afectadas por nuestro consumo insaciable están escondidas entre los hilos, así que hacemos estos viajes formativos cada año, donde llevamos a influencers, diseñadores de la nueva generación, para que conozcan a estas mujeres, se sienten con ellas, compartan una comida, que vean el impacto de la producción en masa […] y que volvamos a esas relaciones especiales en las que amábamos las cosas, porque las cosas que amamos duran y la moda trata de estilo, no de tendencias”.

En la película se muestra cómo trabajan y cómo viven estos trabajadores, en especial las mujeres, a las que se les exige metas de producción y condiciones de vida impensables para un trabajador en EEEUU o la Unión Europea, como hacer 153 camisetas por hora en una jornada de 12 horas diarias, como mínimo, o vivir hacinados en una especie de hospederías propiedad de las fábricas donde trabajan.

Al llegar a la fábrica los tres estudiantes se quedan sin palabras ante las montañas de prendas apiladas en el suelo y las filas y filas de costureras que se dedican a hacer una pequeña parte de cada prenda, como coser un bolsillo o colocar un botón, cientos de veces al día.

“Cuando uno piensa en diseñar piensa en la parte glamourosa, no piensa en las montañas de basura que no se va a descomponer, que solo va  a sumar”, dice una de las estudiantes en la película, que asegura que este viaje cambió totalmente su manera de entender el proceso de crear. “El problema es que la mayoría de gente no sabe esto [lo que pasa en las fábricas]. Nuestra industria sería muy diferente si la gente pudiera establecer la conexión”.
El film presenta también a Ashila Mapalagama, la fundadora de la organización Stand Up Lanka, que lucha por mejorar las condiciones laborales y de vida de las trabajadoras en este país. En una de sus visitas a las casas donde se hospedan las costureras, Ashila atiende a dos chicas muy jóvenes que acaban de llegar a la ciudad después de intentar sin éxito subsistir y ayudar a su familia trabajando en el campo. Están muy asustadas y Ashila les promete que van a cuidar de ellas y que pueden contar con su ayuda. “Si nadie las defiende las hacen trabajar como esclavas”, explica la activista.


Después de la proyección de la película el decano de la school of constructed environments de Parsons, Timo Rissanen, dirigió una charla entre la fundadora de Remake y organizadora de estos viajes educativos, Ayesha Barenblat, la profesora de moda en Parsons, Ybonne Watson, y dos de los estudiantes que viajaron a Sri Lanka, Loli Tzouka y Yimin Deng, en la que se habló de la futura colaboración entre la escuela de moda y la organización que dirige Barenblat y, después de que los estudiantes se quejaran de que en el curriculum de la escuela no hay suficiente información ni clases sobre cómo funciona la cadena de producción en la industria textil y cómo viven las personas involucradas en ella, Rissanen y Watson aseguraron que están en conversaciones para conseguir que más programas como este viaje y película formen parte de los cursos de moda que se imparten en esta que es una de las escuelas de moda más prestigiosas del mundo.

Si quieres ver el evento completo, sigue este link al livestream. La película Made in Sri Lanka: Humanizing the fashion supply estará disponible en la web de remake.world después de las proyecciones del mini film en San Francisco, Los Ángeles y Amsterdam.

Por Irene San Segundo